Veracruz (México), 3 mar (EFE).- Las autoridades mexicanas no han detectado víctimas ni daños materiales tras el sismo de magnitud 5,7 que sacudió este jueves el este y el centro del país, activando la alerta sísmica.
Si bien el movimiento telúrico se sintió con intensidad en la ciudad de Xalapa, capital del oriental estado de Veracruz, y en la zona turística del puerto de Veracruz-Boca del Río, no se informó de personas heridas y de daños en la infraestructura urbana o estratégica.
Tras el desalojo de edificios públicos y escuelas, elementos de Protección Civil y Seguridad Pública del estado iniciaron un recorrido sin que hubiera afectaciones en instalaciones estratégicas ni urbanas.
"Después del monitoreo preliminar debido al temblor que marcó el Sismológico Nacional como epicentro en Isla, Veracruz, reportamos que hasta el momento no se tiene ninguna novedad relevante. No hay afectaciones y se sigue monitoreando", informó el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García.
El gobernador de este oriental estado, epicentro del movimiento telúrico, indicó que no hay afectaciones ni en las plantas hidroeléctricas ni en la central nuclear de la región.
Poco después del sismo, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, dijo en Twitter, que no había afectaciones y aseguró que se activaron todos los protocolos.
Mientras que Alejandro Murat, gobernador de Oaxaca, estado vecino con Veracruz, también informó de que hasta el momento "no hay daños registrados".
La alerta sísmica obligó al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a cancelar momentáneamente su conferencia diaria en Palacio Nacional.
"Afortunadamente no se están reportando por el momento daños graves por el sismo", dijo el mandatario al retomar la rueda de prensa.
Un sismo de magnitud 5,7 sacudió este jueves el este y centro del país, percibiéndose muy levemente en la capital, según informó el Servicio Sismológico Nacional (SSN).
"Sismo magnitud 5,7 localizado a 14 kilómetros al norte de Isla, en Veracruz", detalló este organismo, que preliminarmente había detallado que el terremoto era de magnitud 6,2.
El sismo se produjo a las 08.40 hora local (14.40 GMT) y activó la alerta sísmica de la capital y buena parte del país, lo que llevó a miles de personas a evacuar temporalmente los edificios.
Uno de los sismos más recientes fue el del pasado 7 de septiembre, que fue de magnitud 7,1 y con un epicentro muy cercano al balneario de Acapulco, en Guerrero, donde causó daños materiales.
Mientras que a mediados de 2020, en plena pandemia de coronavirus, un sismo de magnitud 7,4 dejó una decena de muertos y una veintena de heridos en el sureño estado de Oaxaca.
En 2017, fallecieron 471 personas en México a causa de tres sismos, los días 7, 19 y 23 de septiembre, en la mayor tragedia natural en México desde el terremoto de 1985, que dejó miles de muertos en la capital del país.