COLUMBUS, Ohio — El país está en época de elegir un nuevo presidente a través del voto.
Esto es un privilegio y a la vez un derecho para los ciudadanos estadounidenses mayores de 18 años, aun teniendo discapacidades o si enfrentan barreras del lenguaje.
Toda persona que tenga discapacidad está protegida por la ley conocida como Americans with Disabilities Act (ADA) de 1990, que establece “una prohibición clara y completa en la discriminación por motivos de discapacidad”.
Por lo tanto, bajo esta ley los electores con discapacidades tienen derecho a:
-Votar en privado sin ayuda
Según la Secretaría del Estado de Ohio en su página web oficial, todos los lugares de votación deben tener una máquina accesible para personas con discapacidades.
“Estas máquinas incluyen funciones como boletas de audio, almohadillas táctiles en Braille, funciones de impresión/zoom grandes y ajustes de altura e inclinación en las pantallas”.
Recomendación:
Cuando llegue a su lugar de votación, informe a los trabajadores electorales si desea utilizar las máquinas de votación que cumplen con la ADA.
-Contar con rampas de acceso
Los centros de votación deben tener estacionamientos accesibles con rampas para sillas de ruedas, entradas anchas y pasamanos en las escaleras.
-Recibir asistencia para votar
Una persona brindará asistencia a cada votante con alguna condición visual, física o mental, al igual que para quienes tengan dificultades para leer y escribir.
De igual forma, hay ayuda disponible para cualquier votante que tenga un tipo de impedimento que obstaculiza su capacidad de completar adecuadamente la boleta de votación.
-Usar la opción de “Curbside voting”
Dos funcionarios electorales de cada partido pueden ayudar en el caso que la persona no pueda ingresar al centro de votación,
Podría hacerlo desde la acera del edificio, en la comodidad del vehículo, transporte especial o también en la puerta del edificio, si la condición de salud lo permite.
-Marcar “X” si no puede firmar
Si la persona no puede firmar, tiene la opción de hacer una “X”, que será endosada con la firma del asistente electoral frente a un funcionario, atestiguando la integridad del voto.
