COLUMBUS, Ohio — El estado de Ohio hizo pública una lista que incluye 235,000 personas que podrían ser eliminadas del padrón electoral.
Ohio se encuentra entre los estados que cuenta con las leyes de votación más estrictas del país, requiriendo desde documento de identificación a la hora de votar, hasta disposiciones que permiten a los oficiales eliminar del padrón electoral a personas inactivas.
Varias organizaciones defensoras de los derechos civiles, sostienen que estas medidas privan de los derechos a cierta parte de la población, especialmente minorías pobres.
Estas purgas de electores tienen como objetivo eliminar a fallecidos, a quienes se mudaron sin actualizar su información, y otros que simplemente no hayan votado en las últimas seis elecciones.
La regla fue desafiada en las cortes, donde activistas alegaron que tales leyes suprimen el voto.
El año pasado, la Corte Suprema en una decisión de 5-4, con mayoría conservadora, encontró la ley constitucional.
Varios estados, además de Ohio, utilizan este mecanismo de purga: Florida, Carolina del Norte y Georgia. Todos gobernados por republicanos, han sido criticados por organizaciones defensoras del derecho al voto.
Legisladores republicanos moderados en Ohio, decidieron encontrar un punto medio al hacer públicas estas listas y las enviaron a organizaciones para su revisión.
En el pasado, se realizaba a puertas cerradas, sin informar a la comunidad de su contenido.
Jen Miller, quien fue entrevistada por el New York Times, trabaja para la Liga de Mujeres Votantes de Ohio, una de las organizaciones encargadas de revisar la lista buscando encontrar personas que pudieran volver a ser registradas.
Miller encontró que su nombre se marcó como alguien inactivo en el padrón, es decir, que no había votado en varios ciclos electorales. Estaba en proceso de ser eliminada por el estado.
“Voté tres veces el año pasado. Creo que no tenemos idea de a cuantas personas más les sucedió esto”, dijo Miller.
Gracias al arduo trabajo de las organizaciones, se logró descubrir que más de 40,000 personas de la lista se eliminaron por error, evitando así que fueran rechazadas en la mesa de votación el día de las elecciones.
Este es un triunfo para la transparencia a la hora de crear estas listas de parte del estado, algo por lo que activistas de derechos civiles han estado luchando durante años y que finalmente se logró bajo el mandato del Secretario de Estado, Frank LaRose.
“Estamos hablando de colaboración masiva al simplemente hacer la lista pública”, expresó LaRose, cuya oficina supervisó la purga y maneja las elecciones en Ohio.
Se espera que otros estados sigan el ejemplo de Ohio al hacer públicas las listas de purga para revisión.
Es una manera de mantener los padrones actualizados, pero bajo la lupa de grupos que protegen a los votantes y sus derechos.