La Habana, 7 oct (EFE).- Más de 84.000 estudiantes de último año de bachillerato, enseñanza pedagógica y técnica profesional se reincorporaron a las aulas cubanas esta semana tras varios meses de clases virtuales por la pandemia buscando cumplir su sueño: graduarse.
El período lectivo presencial se ha reiniciado de forma gradual en todas las provincias del país, excepto en Pinar del Río (occidente), Sancti Spíritus (centro), Las Tunas (oriente) y el municipio de Santa Cruz del Sur, en la centro-oriental Camagüey.
Lo ha hecho posible, entre otros factores, el avance de la vacunación masiva contra la covid-19 en Cuba, donde el 50 % de la población (5,6 millones de personas) ya ha completado el esquema de tres dosis de las fórmulas locales Abdala, Soberana 02 y Soberana Plus.
Ismerys e Iván comparten curso con otros 471 compañeros de último grado de bachillerato del Instituto Preuniversitario Eduardo Delgado en el municipio habanero de Boyeros.
En este centro educativo, visitado por un equipo de Efe, la nueva normalidad va acompañada de estrictas medidas de protección para evitar contagios porque, en palabras de Ismerys, "hay que cumplir el objetivo de graduarse y llegar a la universidad".
La joven comentó que aún cuando las teleclases (en la televisión nacional y plataformas online) funcionaron para ella, "no es lo mismo un profesor que explique las dudas personalmente".
A su lado, Iván aprovecha el receso escalonado de 15 minutos para recordar que es "fundamental cumplir con las medidas del distanciamiento y poder graduarse, porque llevamos dos cursos así".
Lorenis de la Caridad es otra de las muchachas a las que le hacía mucha ilusión "regresar" ya que, al igual que sus compañeros, busca graduarse.
Ella resaltó el trabajo "arduo e intenso" de los maestros del centro al enviarles los materiales de estudio cuando pasaban las clases por la televisión.
En esa institución capitalina hay un total de 1.396 estudiantes de entre 15 y 18 años de edad que se preparan durante tres cursos para ingresar a la Educación Superior, explicó su director, Arday Prieto.
El profesor aseguró que es obligatorio usar la mascarilla, lavarse las manos y mantener la distancia entre los alumnos, una normativa cuyo cumplimiento es a veces difícil de controlar.
EL RETO DE LAS CLASES PRESENCIALES
Tras el inicio de la pandemia en Cuba en marzo de 2020, los distintos niveles de enseñanza adoptaron variantes como la transmisión de clases en la televisión nacional y los cursos habilitados en plataformas digitales para las universidades.
El actual período lectivo 2020-2021 se reanudó hace un mes en todo el país en forma de teleclases y a distancia tras interrumpirse en abril de 2020, cuando confirmaron el primer positivo del coronanavirus.
El pasado otoño, los centros de enseñanza en las provincias menos afectadas por el virus retomaron las clases presenciales, pero el último rebrote de finales del año pasado supuso la vuelta a la educación a distancia en todo el país.
La ministra cubana de Educación, Ena Elsa Velázquez, comentó a la prensa en septiembre que el inicio en condiciones normales del venidero curso 2021-2022 está previsto para finales de febrero o principios de marzo del año próximo.
Explicó que seguirán las medidas de higiene como el uso de la mascarilla, el distanciamiento social y el lavado frecuente de manos.
La titular comentó igualmente que Cuba aspira a volver a tener su período escolar habitual de septiembre a julio, completo y de forma presencial para el curso 2023-2024.
Mientras tanto, el reto es difícil para estudiantes como Ismerys, Iván y Lorenis, cuyo único sueño es poder terminar, pese a la pandemia, y alcanzar una carrera universitaria.
Laura Becquer