Guadalajara (México), 24 sep (EFE).- El escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez afirmó este viernes que el confinamiento provocado por la covid-19 propició que la humanidad se acostumbrara a contar los muertos y a convivir de cerca con la muerte.
Durante el segundo día de actividades de la IV Bienal de Novela Mario Vargas Llosa que se desarrolla hasta el 26 de septiembre en la ciudad de Guadalajara (oeste de México), el autor criticó que en muchos países se hablara del combate al virus como si fuera una guerra, pues esta palabra dota de un significado distinto a la pandemia.
"El lenguaje tiene una capacidad misteriosa para pensar por nosotros, para condicionar la manera en cómo entendemos un asunto, hablar del virus con el léxico de una guerra tiene consecuencias como que empezamos a aceptar los muertos. (...) Eso nos deshumaniza", dijo.
Durante su participación en la mesa "Libres a pesar de todo: literatura y confinamiento", el narrador reveló que fue uno de los muchos lectores que buscaron respuestas a la pandemia en libros como "La peste" de Albert Camus o "El diario del año de la peste", de Daniel Defoe.
Vásquez, finalista del Premio de Novela Mario Vargas Llosa, por "Volver la vista atrás", señaló que en la obra de Camus uno de los personajes aconseja a los médicos abrir las ventanas y no acostumbrarse a la muerte de los otros.
"En algún momento de pesimismo pensé que eso nos estaba pasando, que nos estábamos acostumbrando como sociedades a la muerte de los otros, y que ahí, entonces, empezamos a perder", expresó.
En tanto, la narradora argentina Gabriela Cabezón Cámara argumentó que la muerte ha sido parte de los países latinoamericanos en diferentes momentos de la historia, pero la diferencia con este momento es que la covid-19 hizo a las personas darse cuenta que la muerte podría llegar a cualquier persona de manera inesperada.
"Lo que generó tanto movimiento es que podría ser la muerte de nosotros también y de cualquiera, la del hombre más poderoso del mundo y eso la hizo tan distinta a otras (tragedias) como la contaminación del aire que mata a siete millones de personas", dijo.
La muerte llegó tan rápido a tantos lugares que logró convertirse en una estadística que servía para regular si era viable salir o no de la casa, aseguró el escritor peruano Santiago Roncagliolo.
"Todos estos números diciendo cuánta gente se estaba muriendo afuera era como ver el pronóstico del clima para ver si se podía salir de casa, esta numerología de la muerte hizo que fueran cifras a las que nos acostumbramos y convertimos un indicador", aseguró.
A la Bienal asisten 31 escritores de habla hispana y es organizada por la Cátedra Vargas Llosa, la Universidad de Guadalajara y la Fundación Internacional para la Libertad, con el apoyo de la mexicana Feria Internacional del Libro, y continuará con mesas de discusión hasta el próximo domingo, cuando se dé a conocer el fallo del premio. (foto)