Cotoca (Bolivia), 29 sep (EFE).- Los indígenas bolivianos que iniciaron hace más de un mes una caminata desde la ciudad amazónica de Trinidad se acercan a su destino final en Santa Cruz, la mayor y más próspera urbe del país, para reclamar al Estado respeto por sus territorios y costumbres.
Los indígenas pasaron la noche en la ciudad de Cotoca, a menos de 20 kilómetros de Santa Cruz, y este miércoles prevén avanzar hasta una universidad que se encuentra en las afueras de la urbe cruceña a donde ingresarán el jueves, informó a los medios el dirigente Marcial Fabricano.
"Salimos hoy (miércoles) después del mediodía hasta todo lo que tengamos de día, no vamos a andar de noche por seguridad de nuestros hermanos", indicó Fabricano, un líder histórico de los pueblos indígenas del oriente que en 1990 encabezó una marcha que puso en el mapa a estas etnias ignoradas durante décadas por el Estado.
En la víspera, los indígenas escucharon una misa celebrada en el santuario de la Virgen de Cotoca por el arzobispo de Santa Cruz, Sergio Gualberti.
La marcha, que partió de Trinidad el pasado 25 de agosto, envió cartas a los cuatro poderes del Estado para un diálogo en el que demandarán respeto pleno de sus derechos ante las invasiones de sus territorios, los incendios forestales y los proyectos gubernamentales en sus tierras sin consultarles previamente, entre otros.
Los marchistas, que han conformado un "Parlamento de Naciones Indígenas de la Amazonía, Oriente y Chaco de Bolivia", también enviaron cartas para pedir el acompañamiento de la Unión Europea (UE) y la representación de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en este diálogo.
Marcial Fabricano lideró en 1990 la marcha de un millar de indígenas de diferentes etnias que recorrieron a pie más de 600 kilómetros desde Trinidad hasta La Paz para reclamar atención a sus demandas de dignidad y territorio.
Aquella movilización consiguió que el Estado reconozca tres territorios de un total de dos millones de hectáreas y se propongan reformas constitucionales para reconocer los demás derechos de los pueblos originarios.
Los indígenas de la Amazonía boliviana protagonizaron posteriormente otras marchas de Trinidad a La Paz, como las de 2011 y 2012 en contra de un proyecto del entonces Gobierno de Evo Morales para construir una carretera en medio de una reserva natural en el centro del país.
La nueva marcha es cuestionada por indígenas afines al gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS), parlamentarios oficialistas y el mismo Ejecutivo que aseguran que tiene móviles políticos.
El problema por la distribución de tierras y las denuncias de invasiones de territorios indígenas por parte de colonos ha causado tensiones entre el Gobierno de Luis Arce y la gobernación cruceña, al mando del opositor Luis Fernando Camacho.
Arce defiende que la distribución de tierras es competencia exclusiva del Gobierno central, mientras que Camacho ha advertido de que no permitirán "que atropellen" las áreas protegidas, ni territorios indígenas.