En Columbus, un programa de verano diseñado para combatir la violencia juvenil celebró la graduación de más de 40 niños que completaron su primera edición. Organizado por madres que han perdido a sus hijos en actos de violencia, el programa se enfocó en ofrecer a los jóvenes una alternativa positiva a las calles, brindándoles habilidades en podcasting, reparación de automóviles, lenguaje de señas y otras actividades.
Los organizadores destacaron la importancia de cada certificado entregado, subrayando que representa una oportunidad para que los jóvenes transformen sus vidas. Niran Johns-Carroll, uno de los participantes, comentó sobre el impacto del programa en su vida, destacando cómo ha ayudado a los estudiantes a comprender mejor la violencia y a buscar formas de prevenirla.
El problema de la violencia juvenil sigue siendo una preocupación en Columbus, con datos que revelan que al menos 20 de las víctimas de homicidio de este año son jóvenes de 21 años o menos. Los organizadores del programa esperan que sus esfuerzos ayuden a reducir estas cifras alarmantes y a fomentar un entorno más seguro para los jóvenes de la comunidad.
