San José, 30 sep (EFE).- Organizaciones de exiliados nicaragüenses en Costa Rica conformaron este jueves la Unidad Democrática Nicaragüense, y solicitaron al pueblo de su país y a la comunidad internacional reaccionar ante lo que consideran una "dictadura" y unas elecciones presidenciales "ilegítimas" programadas para el 7 de noviembre.
Una decena de organizaciones civiles nicaragüenses se unieron en la Unidad Democrática Nicaragüense (UDN) con el fin de, desde el exilio, incidir con acciones para que se cumplan los derechos civiles, se respeten los derechos humanos de la población en Nicaragua y se termine lo que califica como una "dictadura militar" del presidente Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo.
La UDN expresó en un pronunciamiento que con los comicios "la dictadura quiere legitimar los crímenes de lesa humanidad", y afirmó que "tanto el Gobierno de Ortega-Murillo como las elecciones de noviembre son ilegítimas".
Gerardo Sánchez, uno de los dirigentes del movimiento, hizo un llamado a la población nicaragüense a "no prestarse al circo electoral de la dictadura", y pidió a la comunidad internacional "reaccionar con firmeza", expulsar a Nicaragua de la Organización de Estados Americanos y romper relaciones diplomáticas y económicas.
Según el dirigente, estas acciones deben ser una medida para que "la dictadura abandone el poder y entonces hacer elecciones libres, democráticas y transparentes".
La UDN también exige la liberación de 160 personas presas por "delitos fabricados por la dictadura", y justicia para quienes han muerto desde abril del 2018, cuando estallaron las protestas sociales en contra del Gobierno de Ortega.
Las organizaciones agradecieron la acogida que Costa Rica ha dado a miles de migrantes nicaragüenses y afirmaron en un pronunciamiento que este problema migratorio "solo será resuelto con un cambio de Gobierno" en Nicaragua.
Los datos oficiales de las autoridades de Costa Rica indican que desde abril de 2018 han recibido cerca de 100.000 solicitudes de refugio por parte de ciudadanos nicaragüenses que afirman haber huido de la represión en su país.
Más de 4,4 millones de nicaragüenses están aptos para votar en las elecciones generales del 7 de noviembre próximo.
En el marco del actual proceso electoral, las autoridades nicaragüenses han arrestado y acusado a más de una treintena de dirigentes opositores, entre ellos a los aspirantes presidenciales Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora, Medardo Mairena y Noel Vidaurre.
Otros dos políticos de la oposición que anunciaron sus intenciones de aspirar a la Presidencia, María Asunción Moreno y el exlíder de la "Contra" Luis Fley, abandonaron Nicaragua alegando razones de seguridad.
En dichas elecciones Daniel Ortega buscará su tercera reelección consecutiva, para un cuarto mandato de cinco años y segundo con su esposa como vicepresidenta.