Ciudad del Vaticano, 9 sep (EFE).- El papa y el presidente chileno, Sebastián Piñera, dialogaron hoy sobre el "proceso de reforma de la Constitución" en el que está embarcado el país latinoamericano, así como de las relaciones con la Iglesia, durante su encuentro en el Vaticano, parte de la gira europea del mandatario.
"Hoy tuve la oportunidad de tener una conversación muy personal, muy profunda y muy extensa con el Santo Padre”, dijo el jefe de Estado chileno en un mensaje en la Plaza de San Pedro tras mantener su segundo encuentro con el pontífice en el Vaticano en dos años y que se alargó durante una hora, más de lo previsto.
“El respeto a los derechos humanos de todos, el valor de la familia, el valor de cuidar y proteger nuestro medio ambiente, el valor de la solidaridad son valores fundamentales para el Chile que todos juntos queremos construir”, añadió Piñera.
Por su parte, la oficina de prensa de la Santa Sede aseguró que, "en el transcurso de las cordiales conversaciones, se expresó la satisfacción por las buenas relaciones bilaterales existentes, así como por el compromiso común en favor de la paz, la justicia social y la protección de los pobres, los marginados y las personas más vulnerables".
Francisco y Piñera hablaron "de la situación interna del país, prestando especial atención al desarrollo socioeconómico, al proceso de reforma de la Constitución y a las relaciones con la Iglesia católica", resaltó.
Chile ha iniciado un proceso para redactar una nueva Carta Magna que sustituya a la actual, heredada de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y considerada por muchos como el origen de las grandes desigualdades del país, como salida política a la crisis surgida tras más de un año masivas protestas por un modelo socioeconómico más justo.
Esas protestas marcaron el inicio de la gira de Piñera, pues Amnistía Internacional pidió a los mandatarios de los países visitados que le interpelaran sobre la actuación de las fuerzas de seguridad para reprimirlas, mientras once parlamentarios conservadores instaron a Francisco a pronunciarse sobre el proyecto de indulto para los presos de las protestas que se discute en el Congreso.
El Vaticano destacó asimismo como tema del diálogo las relaciones con la Iglesia: "Se manifestó el deseo de una colaboración serena, habida cuenta de la contribución que ofrece al bien de toda la población en los ámbitos caritativo, educativo y social, especialmente en este período crítico de la pandemia", explicó.
Las conversaciones "también permitieron intercambiar puntos de vista sobre algunos temas relacionados con la actualidad internacional y regional y a la promoción de la paz y de los derechos humanos en el mundo", agregó.
El mandatario chileno, que llegó al Vaticano acompañado por el canciller, Andrés Allamand, y el embajador de Chile ante la Santa Sede, Octavio Errázuriz, también se reunió con el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, y después acudió a los jardines vaticanos para visitar el lugar donde el pasado junio fue colocado el mosaico dedicado a la Virgen del Carmen.
En el intercambio de regalos, el mandatario entregó al pontífice argentino un tablero de ajedrez realizado con combarbalita, una roca semipreciosa única en el mundo que abunda en Combarbalá, en el norte de Chile, mientras el papa le regaló a Piñera un azulejo grabado con la imagen de San Pedro y sus escritos durante este pontificado, así como el último mensaje de la Paz.
Este ha sido el segundo encuentro de ambos en el Vaticano, tras el de 2018 y que estuvo marcado por el escándalo de los casos de pederastia y encubrimiento en el clero chileno, y forma parte de la gira europea del mandatario latinoamericano, que ha visitado ya Francia, España e Italia y concluirá en el Reino Unido.
En Roma, este miércoles, Piñera se entrevistó con su homólogo italiano, Sergio Mattarella, y con el primer ministro, Mario Draghi, con quienes abordó las estrategias de recuperación económica pospandémica y el comercio bilateral, además de la lucha contra el cambio climático.
Marta Rullán
