Sídney (Australia), 23 mar (EFE).- El ejército australiano se unió este martes a las tareas de rescate desplegadas por las inundaciones en el este de Australia, las peores en varias décadas, en una jornada de intensas lluvias que podría obligar a la evacuación de unas 15.000 personas más.
Los helicópteros militares y un grupo de soldados han sido desplegados para las tareas de rescate en el oeste de Sídney, especialmente en la localidad de Colo, en donde se ha pedido a sus residentes que evacúen el área.
Los servicios de emergencia del estado de Nueva Gales del Sur, a la que pertenece Sídney, están preocupados por unos 200 residentes que se cree están atrapados en el área debido a la crecida del río, que el martes por la mañana superó los 14 metros y que se cree que su nivel alcance los 16 metros, un pico similar al alcanzado en 1978.
La jefa del gobierno del estado de Nueva Gales del Sur, Gladys Berejiklian, dijo a periodistas en Sídney que teme que otras 15.000 personas más necesiten ser evacuadas, cifra que se sumaría a los 18.000 residentes que ya han sido trasladados por estas lluvias torrenciales e inundaciones.
En la jornada, los ojos se centran particularmente en la zona de Hawkesbury, a la que pertenece Colo, y la de Northern Rivers, más de 600 kilómetros al norte de Sídney, además de la costa Central-Norte, a 400 kilómetros de la capital de Nueva Gales del Sur.
"Algunas condiciones meteorológicas han empeorado anoche", dijo Berejiklian, al advertir de que este martes caerán lluvias y aunque el tiempo mejore el miércoles "en algunas de las comunidades costeras, los ríos seguirán creciendo".
Este martes las precipitaciones pluviales son intensas en el estado de Nueva Gales del Sur, cuya capital es Sídney y que es el más afectado por las inundaciones, grandes cantidades de lluvias torrenciales, incluyendo unos 107 milímetros de lluvias de la costa Centro-Norte.
A raíz de la crisis, el Gobierno de Nueva Gales del Sur, el estado más poblado de Australia y que tiene un área de 801.150 kilómetros cuadrados (el doble del territorio de Paraguay), ha pedido el despliegue de entre 500 a 1.000 soldados para las tareas de limpieza en los próximos días.
Por su lado, el primer ministro australiano, Scott Morrison, advirtió este martes a periodistas en Camberra que las lluvias torrenciales no solo afectan a la costa dado que además de Nueva Gales del Sur, "el suroeste de Queensland y el este y oeste de Australia han sido afectados por inundaciones en el interior".
Las autoridades australianas han advertido de potenciales deslizamientos de tierra, riadas y lluvias torrenciales de más de 100 milímetros que pueden suponer un "grave riesgo" a las vidas en el sur de Queensland.