Sewak Tiwari, de 19 años, enfrenta cargos de secuestro en primer grado tras haber secuestrado a su hija de 11 meses y amenazado a la madre y al bebé. Durante su comparecencia en el condado de Licking, un fiscal reveló que Tiwari hizo amenazas graves, afirmando: "Antes de que nos encuentren, estaremos muertos". Las pruebas en su contra incluyen confesiones sobre huir de la policía y ocultar al niño.
El juez Mallory Land-Libby impuso una fianza de $750,000, pero señaló que Tiwari podría no ser liberado debido a sus antecedentes, que incluyen cargos pendientes de swatting y amenazas de violencia doméstica. La orden judicial también prohíbe a Tiwari tener contacto con la madre y el bebé.
El abuelo de la víctima agradeció a las autoridades por la pronta resolución del caso, subrayando el alivio de ver a su nieta sana y salva tras el incidente. Tiwari fue arrestado en un hotel en Easton después de que se emitiera una Alerta Amber, la cual, según el sargento detective Clint Eskins, fue clave para asegurar el retorno seguro de la niña.
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