La Habana, 5 oct (EFE).- Miles de cubanos reclamaron este martes en las redes sociales la reapertura de los servicios consulares en la Embajada de Estados Unidos en La Habana, paralizados en 2017 por el entonces presidente Donald Trump.
Todo comenzó a primera hora del día, cuando más de una decena de cubanos acudieron personalmente a la legación norteamericana en La Habana para denunciar que sus trámites están en un limbo desde hace cuatro años y no han podido reunirse con sus familiares en EE.UU.
Tras exhibir carteles frente a la embajada, subieron fotos en sus cuentas en Twitter usando la etiqueta #ConsularServicesinCuba, que se convirtió en tendencia en el país caribeño con más de 13.000 publicaciones.
Con igual propósito crearon un grupo en Facebook llamado "Cubanos Unidos por la Reunificación Familiar".
Washington redujo al mínimo la actividad y el personal de su embajada en La Habana y desvió los servicios consulares a terceros países en 2017 por los misteriosos incidentes de salud que afectaron a algunos de sus diplomáticos y cuya causa aún se desconoce.
El Gobierno cubano ha negado cualquier implicación en lo ocurrido y acusa al vecino país -en concreto a la Administración de Trump (2017-2021)- de politizar el incidente.
Como consecuencia, los acuerdos bilaterales existentes para la concesión de visados a ciudadanos cubanos y el programa de reunificación familiar están prácticamente paralizados.
Los cubanos tienen que salir de Cuba para hacer los trámites, que ahora se hacen en México o Guyana.
Por esa situación hay pendientes 22.000 casos de reunificación familiar y 100.000 visas pendientes, según la congresista María Elvira Salazar.
La situación ha provocado un incremento del número de balseros que tratan de alcanzar las costas de Florida desde Cuba, que atraviesa su peor crisis económica en tres décadas, con serios problemas de escasez de alimentos y productos básicos.
El expresidente Barack Obama retiró en 2017 los beneficios migratorios que tenían los cubanos cuando canceló la denominada política de "pies secos/pies mojados", vigente desde 1994.
Sin embargo, permanece en vigor la Ley de Ajuste Cubano, que establece que todo ciudadano cubano que haya entrado legalmente al país puede acogerse a ella al cabo de un año y un día y obtener un permiso de residencia.