Roma, 15 sep (EFE).- El inicio del juicio contra el exministro italiano del Interior Matteo Salvini, por un delito de secuestro de personas por bloquear a unos 150 migrantes en el Mediterráneo durante más de veinte días a bordo del barco español Open Arms en 2019, ha sido aplazado hasta el 23 de octubre.
"Aplazamiento de la audiencia de juicio contra el exministro Salvini. La primera audiencia contra el exministro Salvini, acusado de secuestro y denegación de documentos por nuestra Misión 65 programada para hoy en el Tribunal de Palermo (Sicilia, sur de Italia) aplazada al 23 de octubre. Estaremos allí", escribió este miércoles la ONG en redes sociales.
Salvini había avanzado hace unos días que la audiencia podría ser aplazada, cuando aseguró que esta será la primera vez que esté en un tribunal como imputado y señaló lo "curioso" que era ser enjuiciado en Palermo, pero no en Catania (Sicilia), donde la Justicia decidió no enviarle a juicio en otro proceso similar, en este caso por bloquear un barco militar con 131 inmigrantes a bordo en julio de 2019.
El aplazamiento de la audiencia se debe a razones logísticas, ya que la sala de la segunda sección penal prevista es demasiado pequeña, por lo que el juicio se trasladará al aula de la prisión Pagliarelli, según fuentes judiciales citadas por el diario La Sicilia.
El líder ultraderechista fue imputado el pasado 17 de abril, cuando el juez aceptó la petición de la Fiscalía de procesarlo, sin tener en cuenta las alegaciones de la defensa de que la decisión de bloquear a los migrantes en el Open Arms fue tomada por todo el Gobierno y no solo por el extitular de Interior.
Salvini aseguró entonces que se trataba de una cuestión política, que no fue un secuestro y que en todo caso los secuestradores eran los miembros de Open Arms, que podrían haber ido a cualquier otro país para desembarcar a esas personas y no lo hicieron.
Por su parte, el fundador de Open Arms, Óscar Camps, aseguró que este juicio sentaba "un precedente histórico y judicial decisivo para frenar las políticas europeas que están ocasionando una crisis humanitaria en el Mediterráneo".
Los hechos se remontan a agosto de 2019, cuando el entonces ministro del Interior negó durante 21 días el desembarco de unos 150 migrantes, que habían sido rescatados en el mar por el buque de la ONG española.
Tras más de dos semanas en el mar esperando una decisión de algún país europeo, el Gobierno español ofreció el puerto de Algeciras y después el de Mahón para que el Open Arms llevara a estas personas, pero la organización rechazó esta hipótesis por el cansancio físico y psicológico de las personas a bordo.
La odisea concluyó en la noche del 20 de agosto, cuando la Fiscalía permitió el desembarco en Lampedusa de los 83 inmigrantes que quedaban a bordo, pues muchos habían sido evacuados antes e incluso se habían tirado al agua para llegar a nado a la costa. EFE