¿Sabía usted que en los Estados Unidos el mes de agosto se ha designado para crear conciencia y promover una visión infantil saludable?
Esta es una iniciativa de la Academia Estadounidense de Oftalmología (AAO, por sus siglas en inglés) cuya misión se dirige a los padres, ya que los pequeños poco entienden sobre los problemas oculares que afectan su desarrollo físico y cognitivo.
Tomando en cuenta datos estadísticos publicados por esta organización, “uno de cada 20 niños entre las edades de tres y cinco años tiene un problema ocular grave, y si no se trata a tiempo podría resultar en una discapacidad visual permanente”.
De igual manera se advierte que “la mayoría de los niños en edad preescolar no reciben un examen de la vista de rutina, el cual es crucial para identificar enfermedades oculares”.
La mayor parte del aprendizaje infantil ocurre visualmente; por lo tanto, la salud ocular es fundamental para el bienestar físico e intelectual de un niño, aseguran los expertos, advirtiendo que “los signos comunes de preocupación por la salud visual infantil son frotarse los ojos con frecuencia, entrecerrar, apretar, desviar, inclinar o girar la cabeza para mirar objetos”.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), “aproximadamente el 6.8% de los niños menores de 18 años en los Estados Unidos tienen una afección ocular y visual diagnosticada. Casi el 3% de los menores de 18 años son ciegos o con discapacidad visual, definidos como tener problemas para ver incluso cuando usan anteojos o lentes de contacto”.
La atención preventiva es esencial en el desarrollo físico e intelectual de los niños y por esta razón los planteles escolares exigen la verificación del historial de vacunas, exámenes físicos y odontológicos cuando los pequeños se matriculan en la escuela. Después, los padres deben asegurar que se actualizan las cartillas de inmunización, ya que es requisito para algunos grados.
¿Cuándo se deben hacer los primeros exámenes de visión?
Según lo recomienda la AAO, “los bebés deben tener su primer examen completo de la vista con un optometrista a los seis meses” y de ahí en adelante, “desde el nacimiento hasta los dos años si hay antecedentes familiares o sospecha de un problema ocular”.
Posteriormente, advierte la AAO, que “deben recibir exámenes de la vista adicionales a los tres años, y justo antes de ingresar al jardín de infantes o al primer grado, aproximadamente a los cinco o seis años”.
Pero si usted siente que su pequeño tiene dificultades para observar, le cuesta prestar atención o se acerca demasiado a la televisión, entonces es el momento de coordinar una visita al doctor, quien hará las evaluaciones iniciales y referirá a un especialista en oftalmología pediátrica en busca del diagnóstico y tratamiento correctivo.
Si al final se determina que el niño necesita anteojos, simplemente empodérele para que se sienta seguro con su nueva imagen.
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FOTO: (FPK)
