Imagínese a Leslie González, una niña que regresa emocionada de la escuela por jugar con su perro Homero, su fiel compañero, un San Bernardo de tres años. Él la recibe moviendo su cola y corriendo hacia ella, ansioso por compartir momentos de diversión, pero Leslie lo detiene con un firme “Quieto, quieto, dame la mano…. Bien!”.
Homero es más que una fuente de diversión durante el día, por las noches Leslie lo ve de otra manera: “Yo siento cuando estoy durmiendo que él está vigilando la reja para que no nos pase nada, porque él es nuestro cuidador”.
Estas adorables criaturas de cuatro patas continúan cautivando a incontables norteamericanos.
Desde el 2004, Estados Unidos celebra el Día Nacional del Perro, promovido por Colleen Paige, defensora del bienestar animal. El propósito era promover la adopción y rescate de estos seres peludos llenos de amor.
La época decembrina es un momento perfecto para dar la bienvenida a un canino en su hogar, y la adopción es una excelente oportunidad para hacerlo. Bella, una pastor alemán de nueve años, llegó a la vida de Heidi Álvarez cuando ella tenía cuatro años. Desde entonces, tiene una conexión emocional.
“Ella me ayuda cuando estoy triste; como no tengo hermanos o hermanas, ella es como mi hermana”, dice la niña.
Además de su amor incondicional estos animales tienen sentidos sorprendentes: escuchan cuatro veces más que los humanos, utilizan sus bigotes para ver en la oscuridad y su olfato 40 veces más agudo que el nuestro.
Sin embargo, es importante recordar que no todos son afortunados de ser adoptados. Algunos sufren abusos y maltratos, lo que hace que la prohibición de la crueldad animal sea esencial para proteger a estos seres indefensos.
En Estados Unidos, se estima que 10 millones de perros son maltratados anualmente. Cuando se encuentra uno que muestra agresión o ansiedad, se inscribe en un programa de rehabilitación. Se utilizan técnicas de refuerzo positivo para ayudarlos a superar problemas de comportamiento y sentirse menos temerosos. Es un proceso que puede tomar tiempo y difiere en cada caso.
Por esta razón, le invitamos a considerar que visite un refugio para adoptar un perro como un regalo para todos en casa durante esta época decembrina.
Muchos perritos esperan con los brazos (o patas) abiertos para brindar amor y compañía incondicional. Este año, celebremos la Navidad haciendo un acto de amor al darles hogar y una familia a estos amigos fieles.
¡Felices fiestas!
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*Durante esta época navideña, le invitamos a considerar que visite un refugio para adoptar un perro como un regalo especial. (rawpixels.com) | Leslie González mostrando la reja de su casa donde asegura que su perro Homero la vigila y cuida por las noches. (Cortesía) | Heidi Álvarez con su perrita Bella que llegó a su vida como una cachorra de cuatro meses. Ahora Bella tiene nueve años. (Cortesía)